Candidato desde el vamos, dueño de uno de los planteles armado y pensado para el protagonismo, Atlético Unión no hizo más que ratificar sus pretensiones con una espectacular e infartante victoria ante Murialdo en Mendoza, ganando por 3-2 en el cuarto minuto del descuento, después de haber arrancado perdiendo 0-2 antes de los primeros 11’ de juego. Con esta alegría, el Azul es puntero transitorio de la zona 4 del Argentino B al comenzar la 6ta fecha. Así, con esa mística que tanto lo distingue, Unión terminó silenciando a Murialdo que parecía tener todo resuelto después de ese comienzo sorprendente en el que sacó doble ventaja a través de Roberto Vera, el primero con un penal. Unión no había hecho un buen primer tiempo y estaba en deuda. En el complemento, se jugó a matar o morir y le tocó matar. Descontó con un tiro libre sensacional de Matías Morales y desde ahí, metió presión. Atacó por todos lados, buscó, generó y hasta se jugó en los cambios terminando con tres delanteros y apostando a la ofensiva. Parecía que Murialdo se lo iba a llevar pero el coraje de Unión pudo más. A los 44’ apareció la enorme categoría goleadora del capitán, Federico Acevedo, para empatar 2-2 cuando el partido se moría, pero lo mejor estaba por venir porque Murialdo intentó ir por lo mismo, se adelantó y en la última contra del juego, Lisandro Sacripanti sacó a relucir todo su oficio definidor para encabezar el último ataque de Unión y poner el 3-2 definitivo en el cuarto minuto de descuento de un partido apasionante. Unión tuvo doble mérito: primero cambió a tiempo y después, no se entregó jamás. Con eso, se dio el gusto de ganar en Mendoza algo más que un simple partido.
Unión gozó al final

