En los números, por presente y por realidad, Unión no podía volver de La Rioja con las manos vacías. Un punto sumaba pero en esta pelea a la que sólo le quedan 7 capítulos para el final, ganar ante Américo Tesorieri era obligación. Y así lo hizo. Con la solidez que ha encontrado como visitante y el excelente momento goleador de Lisandro Sacripanti, el Azul ganó por 1-0 y se prendió en la pelea por los puestos principales de la Zona 2 del Federal A. Ahora, en el futuro inmediato, tiene dos partidos como local ante los que mandan como Estudiantes de San Luis y eso le abre otro horizonte.
Para Unión, lo mejor estuvo en el complemento. Y es que en la primera etapa, entre el piso de la cancha, el viento y las ansiedades de Tesorieri, el equipo de Laciar no pudo manejar la pelota como necesita y se limitó a cerrarle caminos a los riojanos. No pasó sobresaltos, no corrió peligro el arco de Abadie pero tampoco pudo llegar con peligro al arco de Corzo, el debutante riojano.
Pero en el complemento, Unión decidió salir a buscar lo que tenía planificado. Entró Walter Estrada, mejoró la posesión de la pelota y a los 6 minutos, Ariel Sánchez se decidió a buscar en el área y lo tocaron. Penal que el inspirado Sacripanti cambió por gol para poner arriba a Unión sobre un rival que había hecho fuerza nada más pero que sintió el impacto del gol en contra. Así, Unión entendió que estaba medio partido ganado y se limitó a cerrar espacios, luchar en todos lados. No aprovechó la contra pero demostró la solidez y el convencimiento de lo que quiere en todo momento. En La Rioja, lo único que servía era ganar y así lo terminó concretando. Un triunfo que lo consolida en todo aspecto para pelear el futuro con otros ojos, sabiendo que tiene dos partidos de local.