De los tres resultados posibles que hay en el fútbol, a Unión lo favorecían dos. Es decir, tenía que ganar o empatar para clasificar a cuartos de final. Pero como nada de eso ocurrió y perdió 1-0 frente a Juventud Antoniana en el partido de vuelta de octavos (en la ida habían igualado 1-1), quedó eliminado y le puso fin a su sueño del ascenso a la B Nacional.
En la primera etapa, el Azul prefirió dedicarse a la marca y no a la posesión de la pelota, por eso el Santo salteño inclinó la cancha en su favor y fue superior. Esa estrategia le salió a la perfección al equipo de Raúl Antuña durante 45 minutos, pero en el tiempo de adición una falla permitió que la visita realice una buena jugada y Monje pusiera el 1-0 para mandar el encuentro al descanso.
En el complemento Unión mejoró pero no le alcanzó. Tuvo varias situaciones de gol que no pudo capitalizar por falta de suerte o simplemente por la falta de efectividad de sus jugadores. Esto, sumado a que el árbitro Francisco Acosta no cobró un penal, imposibilitó que el equipo de Villa Krause igualara el partido para lograr la clasificación y quedó eliminado.

