No es ninguna novedad que este Concepción está armado para luchar por la corona. A su potencial demostrado le agregó dos refuerzos experimentados y de categoría, como los valencianos David ‘Colorado’ Farrán y Pablo Garcés. Entonces, ver que el equipo va tomando forma a medida que avanza el Sudamericano de Clubes de hockey sobre patines no es casualidad. Ayer, después de un primer tiempo parejo ante el entusiasta Universidad de Chile, se refrescó y se armó para desintegrar al equipo trasandino. Terminó ganando 7-4 pero las cifras pudieron ser aún más holgadas.
Y, como en el último partido Estudiantil le ganó a Petroleros de Mendoza, los de la Villa Mallea y los Albiverdes quedaron clasificados para las semifinales, porque matemásticamente ya se aseguraron un lugar entre los cuatro primeros.
Ayer, el desarrollo del partido entre Concepción y los chilenos tuvo dos tiempos bien diferenciados. En el primero todo fue parejo. Se fue al descanso ganando el Azul por un gol de Matías Platero, que definió a la perfección luego de una contra feroz. Pero antes, los árbitros se habían comido un gol legítimo de la "U". Aunque eso no justificó que los chilenos se quejaran de todos los fallos arbitrajes, inclusive hasta teniendo desencuentros entre ellos mismos. En realidad, la desconcentración chilena fue aprovechada por el local, que sacó aquella ventaja a los 15′.
Pero en el complemento la historia cambió. Concepción arrasó a su rival. Porque el Flaco Bueno tuvo puntería y se mandó con 3 pepas. el Colo Farrán organizó el juego, Matías Platero mostró una movilidad increíble y, Fabián Fuentes su inteligencia. Por eso no extrañaron los goles, aunque el relax del final achicó el tablero.
En un torneo duro, en el que las piernas serán un punto vital, aún más si el calor persiste, este Concepción va tomando forma. En realidad, se va armando para buscar lo que perdió en el Sudamericano pasado.