Vélez Sarsfield, con pasajes de fútbol brillante, puso ayer un pie en los cuartos de final de la Copa Libertadores de América al golear 3-0 a la Liga Deportiva Universitaria de Quito, en el Estadio José Amalfitani. En este partido de ida, el pergaminense Augusto Fernández fue el autor material de los dos primeros goles que sirvieron para ganar el parcial. En el segundo período, a los 9 minutos, Sebastián Domínguez terminó de darle forma en los números a la gran demostración fortinera. Antes de llegar al entretiempo, el entrenador Ricardo Gareca optó por preservar al experimentado mediocampista Víctor Zapata, quien con una molestia muscular le dejó su lugar al talentoso y atrevido Ricardo Alvarez. Para mayor complicación el conjunto ecuatoriano afrontó una buena parte del segundo episodio con dos futbolistas menos, ya que por impotencia fueron expulsados Luis Bolaños, a los 8 minutos, y Néicer Reasco, a los 23.
El desquite se desarrollará el jueves próximo, en el estadio Casablanca, en Quito, y allí la formación de Edgardo Bauza tratará de reaccionar y aprovechar la influencia de la altura sobre el nivel del mar. El vencedor de esta llave se medirá en cuartos de final con el que prevalezca entre el Fluminense brasileño y los paraguayos de Libertad.
El comienzo de la primera mitad mostró a un Vélez totalmente decidido en procura de conseguir la victoria y dominó con amplitud a su adversario con un planteo eficaz y con tenencia casi absoluta de la pelota. En el complemento las acciones fueron parecidas y los locales dominaron el partido a su antojo.
Vélez, ganó, gustó y metió un pie en la próxima instancia de la Copa Libertadores. Por eso sonríe.