La tenista checa Marketa Vondrousova -la chica de los tatuajes- conquistó ayer el abierto de Wimbledon, su primer título de Grand Slam, tras imponerse en la final sobre la tunecina Ons Jabeur por 6-4 y 6-4. Vondrousova, de 24 años y ubicada en el casillero 42 del ranking mundial de la WTA, se impuso sobre Jabeur, sexta del mundo, luego de una hora y 22 minutos de juego en la cancha central del All England Club, en Londres.

La checa, dueña de un gran talento y con un tenis muy ofensivo, se convirtió en la primera tenista en la era abierta en ganar el título sin ser cabeza de serie, a la vez que la semana próxima aparecerá como top 10 en el ranking mundial.