Serán 11 partidos en 33 días. Así de loco es el ritmo que se le viene al Atlético Marquesado mirando la doble participación en el Torneo Regional Amateur que comenzará el 19 y la parte final del Clausura de la Liga Sanjuanina apuntando a clasificar a los Cuartos de Final y pelear la final de este segundo certamen del año.

En el análisis de la dirigencia que comanda los destinos del Tricolor están los gastos que demandará esa doble competencia, estimando que por partido como local tendrán más de 1.200.000 de pesos en gastos fijos para abrir la cancha nada más. Ni hablar de viajes, de plantel y de cuerpo técnico. Los respaldos son escasos, la presencia del municipio de Rivadavia ayuda pero no garantiza cubrir todo. Pero en ese panorama, nadie baja los brazos. El desafío está planteado y ahora, decidieron ponerle el pecho.

En la diagramación del plan futbolístico, el entrenador Hubert Piozzi tiene una muy buena base a la que pretenden sumarle no menos de 5 refuerzos, uno por línea al menos. Por ahora se han integrado Emiliano González, que viene de jugar en el fútbol de Santa Fe y regresó un histórico del club como Jorge Olivares que supo de goles decisivos en la historia reciente del club.

En la base están hoy el Fino Balmaceda, Ignacio Gonsález, Maxi Jorquera, Victorio Martiní, Sebastián Domínguez y varios más que han consolidado un estilo en Marquesado que lo ha hecho protagonista en toda la temporada local. Esperan desde el club que el Consejo Federal defina zonas y fixture cuanto antes porque hoy es una carrera casi contra el tiempo, sin saber con quién y cuando jugarian por el Regional.

En cuanto al trabajo especial de mini pretemporada, en Marquesado ya decidieron que no habrá trabajos especiales. Seguirá la misma rutina de laburo semanal, sabiendo que en dos semanas más arrancará una serie de más de diez partidos en un mes, con todo lo que implica para el futbolista ese desgaste. Hay una base en lo físico y con eso, Marquesado se las arreglará.

Se viene el Regional. Un sueño que no debe ser pesadilla. Marquesado dio el salto, quiere algo más pero en su dirigencia saben que no se pueden tirar al vacío. Es hacer cuentas y trabajar para sumar respaldos. Otra no queda.