La indiferencia duele. Ganar tantos campeonatos en todos los rincones del país, merece la respuesta de quienes sostienen el deporte en San Juan y hoy, Pia Manzano lo está sufriendo porque las puertas del mejor ciclismo se le están cerrando.

La última gran decepción fue en los recientes Binacionales de Chile, que la chimbera vio de lejos y con amargura. Es que en los Juegos Evita en Mar del Plata en octubre, Pia ganó medallas pero en la última competencia en La Feliz, sufrió la rotura de su bicicleta. Se quebró el cuadro y se quedó sin máquina.

Multicampeona, Manzano era número puesto para los Binacionales pero sin bicicleta, imposible correr y ganar. Empezó el calvario de intentar arreglar esa bici y su papá Miguel movió todos los contactos porque la economía familiar y los recursos que genera en su taller de bicicletería no dan.

Secretaría de Deportes y municipio de Chimbas fueron los primeros lugares a los que recurrió. Increiblemente, nadie los ayudó y Pía Manzano no viajó. Y San Juan perdió la chance de más medallas.

 

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Ahora, siendo la actual campeona argentina de Ruta y de Pista, Pía tiene una invitación para estar en la Vuelta de Uruguay en diciembre. Los costos de traslado, que llegan casi a los 400 mil pesos, la bajan de la bici y menos hablar del presupuesto para estadía y fundamentalmente, tener una máquina en condiciones. El sueño está ahí, pero la familia Manzano tiene los pies en la tierra y sabe que es casi imposible largar en Uruguay.

Su papá Miguel es el que más la sufre. Esa impotencia le gana y hasta se le quiebra la voz cuando repasa lo que están viviendo: ‘Uno por ahí quiere bajar los brazos. Es buscar, insistir y recibir nada. Le digo a Pia que a lo mejor no sería bueno seguir corriendo porque no tenemos los recursos, pero la veo entrenar, la veo como gana en cada competencia donde se presenta y no le puedo fallar. En el último Argentino de Pista, en Junín, fuimos con lo justo. Vendimos empanadas con mi señora en un semáforo, rematé bicis viejas que tenía en mi taller y con eso fuimos. Pîa ganó todo y la vuelta a San Juan fue sin comer nada, porque volvimos secos. Así cuesta. Así duele. En los Evita, se rompió la bici y el arreglo para soldar el aluminio no lo pude costear. Por carta le pedi ayuda a la intendente de Chimbas y no pasó nada. No había presupuesto. En Deportes, hable con Riveros, con Lara y tampoco me respondieron. Pia necesita una bici que la iguale en la calidad de los elementos que tienen otras chicas y también alguna ayuda económica. No es demasiado pero parece que no le reconocen todo lo que hizo y lo que puede lograr’.

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Ahora el desafío es llegar a Uruguay: ‘En pasajes tenemos como 400 mil pesos, la estadía me la ofrecieron unos amigos uruguayos que saben lo que es Pia corriendo. Pero claro, necesitamos los elementos.

Da ventajas en una bici de aluminio contra las de carbono pero aún así, ella gana. Es protagonista y siempre orgullosamente defiende Chimbas y San Juan en todos lados. Tuve contacto con Jorge Chica, de la UCRA, y tampoco hubo respuestas. Se hace difícil continuar pero viendo lo que ella hace, no se le puede fallar’.
Pia Manzano es una de la promesas más sustentables del ciclismo en San Juan. Con proyección nacional y expectativas internacionales, increíblemente hoy solo recibe indiferencia.