Fernando Gago ya no es el técnico de Boca Juniors. La decisión fue tomada por Juan Román Riquelme y el Consejo de Fútbol la noche del lunes, tras la derrota en el Superclásico ante River el domingo, y fue comunicada este martes a primera hora en el predio de Ezeiza. Así termina un ciclo breve y turbulento, marcado por la falta de resultados y un equipo sin identidad definida.

El exentrenador llegó al complejo deportivo junto a su cuerpo técnico alrededor de las 7 de la mañana, y fue citado a una reunión con Mauricio Serna, Marcelo Delgado y Raúl Cascini. El encuentro duró apenas 15 minutos. Allí le informaron que su ciclo había llegado a su fin, con el argumento de que era necesario “descomprimir la situación”.

Tras la reunión, Gago se reunió con el plantel que ya estaba presente. Les comunicó su salida, les agradeció y, según trascendió, les aseguró que están en condiciones de pelear el título. Luego se despidió uno por uno, recogió sus pertenencias y se retiró del lugar. Minutos después, Serna habló ante la prensa sin aceptar preguntas: “Hemos tomado una decisión y es que hasta acá ha llegado Fernando Gago y su cuerpo técnico con la institución. No ha sido fácil porque es un hombre de la casa”.

El detonante fue la caída en el Monumental, pero hubo otros factores que empujaron la salida del DT: la eliminación de la Copa Libertadores frente a Alianza Lima, el pobre nivel colectivo del equipo y la pérdida de respaldo dentro del vestuario. También jugó un rol clave la presión de los hinchas y la percepción dirigencial de que el ciclo estaba agotado.

Este martes, Mariano Herrón asumió interinamente y ya trabaja con la mente puesta en el partido ante Tigre. La idea del Consejo es que dirija ese último encuentro de la fase regular del Torneo Apertura, mientras se define quién tomará las riendas para los playoffs y el Mundial de Clubes.

Entre los candidatos suenan Gustavo Quinteros, Kily González, Gabriel Milito, Gabriel Heinze, Rodolfo Arruabarrena, Tata Martino y hasta José Pekerman. Mientras tanto, Riquelme y su equipo deben tomar otra decisión clave en un contexto que agota la paciencia del mundo Boca.