La Major League Soccer (MLS) tomó una decisión que sacudió a los fanáticos de Lionel Messi: el astro argentino fue suspendido por un partido tras no presentarse al Juego de las Estrellas disputado el miércoles pasado. La sanción también recayó sobre Jordi Alba, su compañero en Inter Miami, ya que ninguno presentó una justificación que conformara a las autoridades del torneo.
El castigo se aplicará este sábado, cuando las Garzas enfrenten a Cincinnati FC, líder de la Conferencia Este, en un partido fundamental en la lucha por la clasificación a los playoffs. Inter Miami marcha quinto, a seis puntos tanto del play-in como de los tres primeros puestos.
Aunque el técnico Javier Mascherano aseguró durante la semana que Messi arrastraba una fatiga muscular, la MLS no contempló esa explicación. “Tenemos una política clara respecto a la participación en el Juego de las Estrellas y debemos aplicarla”, argumentó Don Garber, comisionado de la liga. “Sé que Messi ama esta liga y que nadie ha hecho más por ella, pero respetamos nuestra normativa”, añadió.
La ausencia del capitán argentino se sentirá especialmente frente a Cincinnati, que ya había derrotado a Inter Miami por 3 a 0 hace apenas dos fechas. Para Mascherano, será un desafío doble: recuperar terreno en la tabla y suplir la baja de su máxima figura en un tramo decisivo de la temporada.