Un joven jornalero falleció ayer en un violento accidente de tránsito en San Martín. La víctima viajaba en su moto con un compañero de trabajo y en plena recta, perdió abruptamente el control del rodado, al parecer, porque sufrió una convulsión. Lo concreto es que ambos se cruzaron de carril y chocaron de lleno contra una farola. El acompañante voló y cayó en un desagüe, mientras que el conductor quedó tendido sin vida a un costado de esa pilastra, informaron voceros familiares y policiales.

Jorge Quevedo se llamaba ese muchacho, tenía 28 años, era el menor de tres hermanos, sufría convulsiones desde niño y vivía en el barrio Independencia, San Martín, comentó entre lágrimas su padre Rodolfi Quevedo. El joven hace un año sufrió un accidente en moto en Pie de Palo, pero salió casi ileso de ese siniestro, dijo un familiar. Sin embargo, ayer no tuvo esa suerte.

Eran las 12.45 cuando el muchacho salió de trabajar de una finca de vid y partió en su moto Honda Titán 150cc junto a su compañero Isidro Ruarte (60). Ambos viajaban sin casco, señalaron las fuentes.

Los obreros enfilaron hacia el Este por calle Laprida y unos 300 m después de pasar Colón, ocurrió el desastre. La versión policial es que en ese momento, Quevedo perdió de golpe el control de la moto en plena recta y se cruzó de carril. Los jornaleros se estrellaron contra una farola y volaron del rodado. El impacto fue tal que la columna metálica quedó doblada y su base de cemento se partió en dos.

Enseguida, una patrulla de la Comisaría 19na llegó al lugar y comprobó que Quevedo había fallecido. Entonces los uniformados se concentraron en sacar a Ruarte del desagüe y lo trasladaron al Hospital Rawson. Allí fue asistido de unos golpes que no ponían en riesgo su vida, informaron fuentes policiales.

¿Qué causó la tragedia? en la Policía creen que el joven sufrió una convulsión en pleno viaje y por eso se produjo el choque. También se hablaba de que se distrajo porque se le voló la gorra, pero esa versión no fue confirmada. De todos modos, la autopsia y otras pericias en el rodado serán claves para despejar esas dudas. ‘Capaz que le dio una convulsión, pero hacía mucho que no le daban. No lo puedo creer’, comentó su padre.