Una pareja la pasó muy mal ayer en la madrugada cuando 3 delincuentes los sorprendieron en su auto en el dique de Ullum. Los ladrones llegaron en un coche y apedrearon el vehículo de la pareja. Al joven lo patotearon y hasta le dieron 2 cuchillazos en la espalda. La chica también fue maltratada por los malvivientes y después les robaron a ambos sus pertenencias. No conformes con el botín, los ladrones se llevaron el auto de la víctimas y a las horas, la Policía lo encontró saqueado y completamente quemado en un baldío en San Martín, precisaron Juan Alberto Agüero, padre del muchacho, y fuentes policiales.

Las víctimas del violento robo fueron identificadas en la Policía como Laura Riveros (22) y Cristian Agüero (28). El muchacho vive en Caucete y tomó el Fiat Siena de su padre para pasar a buscar a la joven por su casa en Rawson, explicó Juan Alberto Agüero.
Las fuentes indicaron que luego se dirigieron a un mirador ubicado a un costado de la ruta 60, unos 150 m al Oeste de Punta Tabasco, Ullum.

Eran alrededor de las 4 cuando la pareja fue sorprendida por los sujetos, armados con cuchillos, que llegaron en un Fiat 147. La versión policial indica que los malvivientes tomaron unas piedras y se las arrojaron a la ventanilla del conductor y al parabrisas. Después, bajaron a la fuerza a los jóvenes. A Cristian le dieron una brutal paliza y 2 cuchillazos, mientras que a su compañera le lastimaron una mano.

En la Policía indicaron que después de golpearlos, los sujetos les robaron las billeteras con dinero (no precisaron cuánto), documentación, sus celulares y el Fiat Siena. Tras el asalto, el auto apareció en el costado Norte de calle Rodríguez, en un santuario del Gauchito Gil situado cerca del río San Juan, en San Martín: estaba quemado y le faltaban una rueda del costado delantero izquierdo, otra del costado trasero derecho, la de auxilio y una etapa de potencia, precisaron.

‘Le han dado una paliza muy grande a mi hijo y tiene suerte de contarla. Lo que me duele también es lo que hicieron con mi auto, porque lo compré con mucho sacrificio y ahora ya no sirve para nada’, se lamentó el padre del muchacho asaltado.