Contundente. Así resultó cada prueba recolectada en la investigación para dar con los sospechosos de matar de un tiro en el pecho a ‘Zurdo’ Jesús Francisco Ormeño (46) para robar su moto la tarde del 16 de mayo de 2011, en Rawson. El reconocimiento fotográfico, testigos que los escucharon autoinvolucrarse, mensajes de texto y hasta el pelo que uno de ellos se cortó para cambiar su apariencia, resultaron un escollo difícil de sortear. Por eso ambos resolvieron que lo más conveniente era confesar su responsabilidad y, a través de sus defensas, acordaron un juicio abreviado con la fiscal de Cámara Alicia Esquivel Puiggrós, en el que se mostraron dispuestos a recibir una pena de 13 años de cárcel: Juan Pablo Alba (alias ‘Juampi’, 21 años) por el robo de la moto y por matar de un tiro al albañil, y Martín Mario Castro (‘Maquelele’, 21 años) por su participación principal en ambos delitos, dijeron fuentes judiciales.

No sólo Alba (defendido por Juan Bautista Bueno) y Castro (lo asistió la defensora oficial Mónica Sefair) llegaron a juicio: Julio Brizuela (20) y Rubén Darío González (21) también aceptaron una condena de 2 años en suspenso (sin encierro) por encubrimiento: se turnaron para ocultar el arma homicida. Ahora, el juez José Atenágoras Vega (Sala II, Cámara Penal) debe resolver.

‘EL ZURDO’

Ormeño había sido un competitivo animador en el ciclismo y un empedernido defensor en el fútbol jugando para ‘los Caranchos’ (Argentinos de la Florida) en Jáchal, tierra donde nació y vivió hasta que, por trabajo, se radicó en el Gran San Juan. Pero allí ‘Zurdo’ encontraría un trágico fin. Fue la tarde del 16 de mayo de 2011 frente a la pensión de Villa Las Rosas, Rawson, en la que pasaba sus días. Aquella vez dejó sus cigarrillos, el TV encendida y salió en su Yamaha 110 cc en una misión que no duró mucho: casi dos horas después volvió, pero antes de entrar a la pensión paró enfrente a comprar fiambre en un negocio. Fue ahí que Alba y Castro, que habían viajado desde Chimbas en micro, la vieron con las llaves puestas y se la robaron, a pesar de la resistencia de Ormeño que alcanzó a verlos y forcejeó con uno de ellos hasta que ‘Juampi’ le disparó a quemarropa. Aquella tarde, Ormeño no llegó vivo al hospital.