El juez del Tercer Juzgado de Instrucción, Guillermo Adárvez, procesó por el presunto delito de coacción a un ex cadete de la Policía: Para el magistrado quedó probado que amenazó a su ex novia y al tío de la joven para que no denunciaran que se hacía pasar por oficial de la fuerza y hasta conseguía que le dieran adicionales, dijeron fuentes judiciales.
El sospechoso en cuestión es Francisco Antonio Sánchez Márquez (28), un joven que en febrero de 2003 fue apresado tras ser sorprendido por intento de robo en un predio de la universidad nacional. Y en setiembre de ese año fue echado de la Escuela de Cadetes de la Policía.
En enero de 2008 Sánchez comenzó a salir con una joven del barrio Municipal, en Capital. Pero algunos comportamientos extraños empezaron a ser cuestionados por los familiares de la joven, a los que siempre se presentó como oficial de la fuerza.
Tanta fue la sospecha, que el tío de la joven, Anselo González, encargó a un amigo policía de la familia que averiguara si el novio de su sobrina era o no un efectivo policial. Y ese policía constató que Sánchez Márquez nunca había pasado de ser cadete.
Entonces González y su hermano citaron en un café al "falso policía" para decirle lo que sabían de él, y entonces -según el expediente- comenzaron a ser amenazados si revelaban esa situación.
Las amenazas pronto llegaron a la por entonces novia, que era la que sabía en detalle de las andanzas de este joven que usaba uniforme y pistola, y decía tener destino en la comisaría 11ra. de 9 de Julio. Es más, la joven sabía que desde la misma policía le daban adicionales en empresas de la zona Este, en una finca de Pocito o en una iglesia de Evangélica de Rawson.
A pesar de las amenazas el sujeto no evitó que lo denunciaran, pero la familia González no dejó sufrir hostigamientos. Es más, la ex novia y su familia hasta tuvieron que cambiar de domicilio y número telefónico para no sufrir persecuciones y violentas advertencias, dijeron las fuentes.
Ante el juez Adárvez, Sánchez Márquez se abstuvo de declarar. Y su defensa no apeló el procesamiento en su contra, precisaron fuentes judiciales.
Ahora el magistrado investigaría al procesado por supuesto fraude, porque en el expediente consta la declaración de al menos un policía que admitió haberle dado adicionales al sujeto, porque también creía que era policía.