Una vieja camioneta Fiat 125, tres motos 110cc y otra de 600cc que estaban a medio reparar, cuatro bicicletas, una heladera, un lavarropas, un termotanque, una cocina, una motosierra, un martillo neumático, un taladro, una máquina de soldar, una cortadora de césped, cuatro catres, dos garrafas, libros, cuadernos, otras cosas y hasta una de las mascotas de la casa, un pequeño Caniche toy. Esas fueron las cosas y el animal que fueron alcanzados ayer en la mañana por un incendio ocurrido en un depósito situado en el fondo de una vivienda en Santa Lucía. Las primeras pericias realizadas por bomberos indicarían que el siniestro fue provocado por un cortocircuito y a pesar de que la dueña de casa y su familia lucharon por extinguir las llamas, todo fue inútil.
A las 9.30, Mónica Archilla estaba junto a sus dos hijos cuando escuchó unas explosiones que provenían del fondo de su casa ubicada en José María Del Carril 922 Sur, Santa Lucía. ‘Fui a ver y me topé con las llamas que salían por el techo y el portón. Eran impresionantes y ahí llamé a los bomberos’, dijo la mujer.
En ese momento, el hijo de Archilla corrió para tratar de abrir las puertas del depósito y al tomar el candado para abrirlas, se quemó las manos. La hija de la mujer también sufrió una quemadura superficial en una pierna, explicaron.
Finalmente, el muchacho lo abrió y uno de los dos perros Caniches toy de la familia pudo escapar, aunque con algunas quemaduras. El otro no tuvo la misma suerte. ‘Ellos (los perros) dormían ahí y cerramos con candado el depósito por las cosas que teníamos. Pobrecitos, uno de ellos pudo salir aunque estaba lastimado. Al otro no lo encontramos’, se lamentó Archilla.
La familia trató de extinguir las llamas que sobrepasaban el techo del depósito, pero no pudieron hacer mucho. Para ese momento, una dotación de bomberos del Cuartel Central llegó a la vivienda y luego de varios minutos los uniformados lograron apagar el incendio, aunque no pudieron salvar nada de lo que había adentro, dijeron en la Policía.
‘No pudimos sacar nada. La camioneta estaba en desuso y no tenía nafta. Las motos estaban a medio reparar por mi marido y mi hijo, pero tampoco tenían combustible. No sé qué puede haber provocado todo esto, tal vez un cortocircuito. Pero tampoco descarto nada, como que alguien haya querido entrar a robar. Por suerte, el fuego no alcanzó la casa’, comentó Archilla.
Más allá de la sospecha de la mujer, en la Fuerza dijeron que en un primer análisis de los efectivos de bomberos detectaron que el dañino siniestro se habría producido por un cortocircuito de la instalación eléctrica del depósito. De todos modos, en la Policía esperarán el resultado final de las pericias para despejar cualquier duda.

