Candela Castro (19) vivió para contarla, que no es poco teniendo en cuenta que su ex la asfixió hasta desmayarla. Que una vez desvanecida le pegó una y otra vez. Tal fue la paliza, que el sujeto creyó que de tantos golpes la había matado y decidió llamar al 911 para confesar el crimen que no fue. El terrible caso sucedió en el departamento Sarmiento.

El drama de esta joven mamá no es de ahora con su ex, viene desde que convivía con Javier Sosa (24), con el que tiene un hijito de 10 meses. "Siempre estuvo loco, no me dejaba hacer nada, ni ir a la salita a buscar la leche, tampoco que vaya a mi mamá", contó a este diario Candela.

Una vez separados, hace unos dos meses, la joven tuvo que cuidarse de que no se acercara por temor a algún ataque. Candela aseguró que el maltrato no sólo era físico, sino también verbal y económica: "No le pasaba plata a mi hijo, no le compraba ropa, nada", agregó.

Sosa vive en Media Agua y Castro en Colonia Fiscal, con su mamá, Cristina Agüero. Anoche, a través de un mensaje y con la excusa de entregarle un regalo para su hijo, la citó cerca del hogar materno de Candela, a la altura de una casa abandonada.

A las 22:30, Sosa la esperaba en la vereda. Una vez que tuvo cerca a su exmujer, la agarró y la llevó al interior de esa vivienda deshabitada. Primero le pidió tener relaciones, ella se negó y "se volvió loco". Candela contó que empezó a insultarla y a recriminarle unas fotos que subió a Facebook con un chico.

Y el nivel de violencia escaló: "Me agarró del cuello hasta desmayarme", apuntó la joven. Cree que se despertó unas dos horas después, caminó como pudo a su casa y le contó lo sucedido a su mamá. Cuando se miró al espejo, se dio cuenta que una vez en el piso la había golpeado en el rostro y el resto del cuerpo.

Sosa creyó que la había asesinado, llamó a la policía y se entregó. Actualmente está detenido en un calabozo de la Seccional 8va, de Sarmiento. A la espera de lo que resuelva la Justicia; mientras que Castro se recupera de las lesiones en una cama del Hospital Ventura Lloveras.