Desde la familia dicen que el ataque no fue contra ellos, que la ligaron sin querer por una patota que pasó peleando por la calle. Lo llamativo es que 6 balazos impactaron en distintas partes de su auto y otro disparo atravesó la puerta del garaje de su vivienda. Esto hace suponer más un ataque mafioso que un hecho casual, más todavía si el dueño de casa es un supuesto narcotraficante que cayó preso en 2011 con 10,100 kilos de cocaína y que goza de prisión domiciliaria en ese domicilio de Trinidad, Capital.
La hipótesis policial es esa, la del ataque mafioso que tuvo como único destinatario a Roberto Darío ‘Narigón’ Muñoz (41), quien tiene una causa por tráfico de droga en la Justicia de Mendoza, informaron fuentes del caso. Este hombre fue apresado el 15 de octubre de 2011 cuando fue a retirar una encomienda en su Toyota Hilux al depósito de Autotransporte San Juan Mar del Plata, en Trinidad, Capital, y lo emboscó un grupo de policías y gendarmes mendocinos. Al revisar el paquete, le hallaron 10,100 kilos de cocaína. Ese operativo fue la derivación de un procedimiento anterior realizado el 7 de septiembre de ese año en Jocolí, Mendoza, donde detuvieron a otros dos sanjuaninos y secuestraron 14 kilos de cocaína y 150.000 pesos.
El día que apresaron a Muñoz, también allanaron su casa en calle Estrada 344 en Bº Fray Justo Santamaría de Oro, en Trinidad, y detuvieron a su hijo por unos gramos de cocaína. Roberto Muñoz fue llevado preso a Mendoza y luego procesado, pero después lo trajeron al Penal de Chimbas. A principio de este año, a raíz de una afección en la vesícula debió ser operado y obtuvo la prisión domiciliaria, fue así que volvió a su casa en la calle Estrada.
La sospecha policial es que Muñoz tiene aún alguna deuda pendiente. Y esto habría quedado a la vista ayer minutos antes de las 8, cuando desconocidos largaron una lluvia de tiros en la puerta de su casa: seis balazos impactaron en su auto Peugeot 307, que estaba estacionado en la calle, y un sexto disparo pegó en la puerta del garaje de la vivienda, según fuentes del caso. La familia descartó que el ataque sea un ajuste de cuentas, por el contrario dijeron que todo fue producto de la pelea de unas personas que pasaban por ahí. Eso es lo que ahora investigan los policías de la Seccional 3ra.