Una persecución a toda velocidad, tiros, un sospechoso herido de bala, el secuestro de una pistola 9mm. -que sería de un policía-, un patrullero dañado y un enfrentamiento a pedradas y con perdigones de goma entre efectivos y vecinos de un barrio, para evitar que detengan a tres sujetos. Esa secuencia cargada de adrenalina se registró ayer en la tarde en la detención de tres supuestos ladrones a bordo de un Fiat 128, quienes le habrían robado a mano armada una moto a un joven. Tras el robo, la policía localizó a los sospechosos en Chimbas, y los persiguió. Los sujetos habrían disparado contra las patrullas en el alocado raid y luego, cuando buscaron refugio en el Bº Costa Canal II, Capital, los tres cayeron con el arma, a pesar de que los vecinos se enfrentaron con la policía para evitar el arresto, dijeron fuentes policiales.

Todo comenzó a las 16,40 cuando Guillermo Victoria (20) se detuvo a comprar en un kiosco de Tucumán y Circunvalación, Capital. Allí, dos sujetos con el rostro cubierto lo encañonaron, lo hicieron arrodillar y escaparon en su Motomel 250cc., acompañados por otro sujeto en un Fiat 128, según la policía.

Con los datos de testigos, la policía comenzó a rastrillar diferentes zonas buscándolos. A las 17.15, dos patrulleros del Comando Radioeléctrico se cruzaron con los sospechosos en el auto en calle Río Negro, en Villa El Salvador, Chimbas.

Los efectivos los persiguieron y pidieron apoyo. En el medio, uno de los ocupantes disparó contra las patrullas y luego, por segunda vez, cuando los tres sujetos descendieron del rodado en el Bº Costa Canal II, informaron fuentes policiales.

En ese barrio, los policías apresaron a Emanuel Gastón "El Nolo" Salinas (19), quien tenía perforado el tobillo derecho por un balazo. Y a sus presuntos cómplices: Raúl Ernesto "Chocolate" González (35) y a Maximiliano Armando "El Pato" Zárate (20). Todos, con múltiples antecedentes, según la policía.

En el rodado encontraron una pistola 9mm. con dos vainas servidas. Esa arma sería robada a un policía e investigan si el Fiat tenía pedido de secuestro, señalaron las fuentes.

Pero su detención no fue sencilla: unos 40 policías de diversas áreas, dirigidos por el comisario mayor Domingo Allegue (Regional Capital), tuvieron que repeler con balas de goma las pedradas que arrojaban los vecinos contra los efectivos. Algunos de los proyectiles dañaron el parabrisas de un patrullero y golpearon -sin mayores consecuencias- a varios efectivos, informaron en la policía.