Pedro Oris y la docente Alejandra Ríos darán su versión de los hechos sobre el brutal golpe en la cabeza que por poco no terminó con la vida de la pequeña hija de la mujer, Camila, el 25 de octubre de 2013 en Santa Lucía. Pero ayer sus defensores Leonardo Arancibia (asiste a Oris) y Mabel Miriam Szalankiewicz (defiende a Ríos) anticiparon que lo más probable es que esos relatos no se produzcan hoy, en el inicio del juicio contra ambos, sino en el curso del debate.
Así, la apertura de las audiencias en la Sala I de la Cámara Penal podría incluir sólo la lectura de la requisitoria fiscal, es decir el relato de los hechos y las pruebas que, en opinión de fiscalía, complican a Ríos y a quien era su pareja y es padre de su otra hija, como autores de esa ‘tentativa de homicidio agravada’ que dejó con graves secuelas a esa niña, que por entonces tenía 8 años.
Aquella vez, la pequeña estuvo muy grave. Pero luego de una intensa lucha por parte de los médicos y la propia víctima, se salvó. Incluso se tomó el caso como un milagro. Cuando habló, fue clave para el caso, pues implicó a ambos acusados como autores de malos tratos y golpes.
Su relato fue conmovedor, pues la nena evidenció momentos de gran angustia y en la pericia psicológica aceptó dibujar ‘todo menos eso’: una familia.