Lo que debía ser un festejo entre amigos para celebrar el Día del Estudiante y la llegada de la primavera, casi termina en una tragedia ayer en la madrugada: cinco jóvenes terminaron con diversas heridas cortopunzantes en el cuerpo después de pelearse con otro grupo de adolescentes que trataron de robarle una cámara digital a una de las víctimas en el interior del camping del colegio Don Bosco, situado sobre ruta 20, en Santa Lucía. Después de la batahola, los heridos fueron trasladados al hospital de Niños donde fueron asistidos de las lesiones que no comprometían sus vidas, dijeron en la policía. Pero lo curioso llegaría después: en la mañana y tras la gresca, la policía clausuró el predio cuando estaba lleno de gente (se permitió permanencia pero nadie más entró), por falta de seguridad y ausencia de controles en el ingreso de jóvenes con bebidas alcohólicas, señalaron fuentes policiales.

La pelea ocurrió alrededor de las 3. A esa hora Marcos Marín (19), su hermano Germán (15) y sus amigos Mauricio (14), Mauro (14) y Rodrigo (15). Los cinco jóvenes son de 9 de Julio y Caucete y se habían juntado el martes en la noche con otros 15 amigos para ir acampar y festejar el día del estudiante, contó Marcos Marín, quien agregó "nadie nos revisó si llevábamos alcohol. Algunas botellas teníamos. Nos cobraron la entrada y nada más".

Entre bebidas y música, los adolescentes armaron la carpa y comenzaron a bailar y hacer amigos. Así siguieron hasta la madrugada. Pero la fiesta se interrumpió cuando Marcos vio a Mauricio correr desesperado mientras era perseguido por 5 jóvenes, dijo el muchacho.

Supuestamente, le querían robar una cámara de fotos y cuando se negó, le pegaron un puntazo en el costado derecho del abdomen, explicó Marcos. Allí Germán, Marcos, Mauro, Rodrigo y los demás chicos corrieron a defender a su amigo que estaba tirado en el piso, ensangrentado y siendo pateado. "Todos esos pibes tenían cuchillos y nos apuñalaron, estaban sacados. No los conocemos y ni me di cuenta cuando me pegó los puntazos", dijo Marcos Marín.

Tras la pelea, los agresores desaparecieron y los cinco muchachos más lastimados fueron trasladados al hospital. Quienes sufrieron las peores lesiones fueron Mauricio, con un puntazo en el abdomen. Germán sufrió 6 puntazos en la espalda, otro en la cabeza y golpes. Y Marcos, un corte en un brazo y dos heridas cortopunzantes en la espalda y en la sien izquierda. Los otros dos jóvenes tenían heridas menores, dijeron en la policía.

Ayer en la mañana, policías de la comisaría 5ta., dirigidos por el subcomisario Abel Quinteros, clausuraron el camping: "lo clausuramos por la pelea y porque hemos constatado que el concesionario del predio no contrató seguridad alguna y no se controló el ingreso de bebidas alcohólicas como debía", señaló el subcomisario Quinteros.

Por su parte, Daniel Landa, el concesionario, afirmó que "cuatro personas controlaron en todo momento el ingreso de bebidas y el predio. A partir del año que viene, no voy a permitir para estas fechas que acampen más porque me traen muchos problemas".