Gustavo Fabián Cortez (26) considera injusto convertirse en el primer sanjuanino en sufrir una pena de prisión efectiva por un homicidio culposo sin tener ningún antecedente en su planilla prontuarial, ni siquiera por una falta. El 26 de agosto de 2009 se metió en auto a una vereda en Rawson y mató sin querer a la estudiante Celeste Archerito (19), y por eso el 26 de abril pasado fue condenado a 3 años y 8 meses de prisión de cumplimiento efectivo, el resultado que pedía la familia de la víctima. Cortez pidió revisar el fallo, pero el 28 de octubre pasado la Corte de Justicia lo confirmó y ayer el condenado volvió a reclamar para no ir preso al Penal de Chimbas. Esta vez quiere llegar ante la Corte Suprema de Justicia de la Nación.

Su planteo lo formuló su nuevo abogado, Federico Rodríguez, sobre dos ejes: la ‘arbitrariedad’ del fallo por no valorar testigos y pericias que -en su opinión- hubieran jugado otro papel en el resultado final del juicio. Y el hecho (‘injusto’, dice) de ser el primer condenado a una pena efectiva sin tener ningún antecedente: ‘No sería bueno que por la presión de la familia (de la víctima) se fije un precedente que en el futuro signifique la cárcel para cualquiera por un homicidio culposo. Mi cliente no tiene ningún antecedente’, dijo ayer Rodríguez, quien citó otros fallos, como el caso de un sujeto condenado a prisión en suspenso por matar en un choque a 6 personas.

¿Por qué la insistencia de Cortez? ‘Por sus derechos, no por las falsas especulaciones de que quiere pasar las fiestas con su familia. Mi cliente está muy arrepentido y destrozado, porque ya no soporta ver a su madre todos los días llorando y reprochándose por haberlo despertado aquel día para que la llevara en auto al trabajo. Mi cliente y su familia no tienen nada que festejar. Si ella hubiera visto que su hijo no estaba en condiciones de manejar, esa vez lo dejaba durmiendo’, dijo ayer Rodríguez.

¿Cómo sigue el caso? Según Rodríguez, ahora la Corte pedirá la opinión de la Fiscalía General de Corte y a la familia de la víctima antes de resolver. Si da el visto bueno, Cortez seguirá libre hasta que resuelva el máximo tribunal del país. Si lo rechaza, podría quedar preso.