Daniel Fernando Illanes (32) comenzó ayer a defenderse de una grave imputación en su contra: un supuesto homicidio agravado por ensañamiento, porque se sospecha que hizo sufrir al chef Carlos Echegaray (47) cuando lo mató de 8 cuchillazos entre la noche del lunes 6 y la madrugada martes 7 de enero pasados, en la casa del fallecido en Estados Unidos 326 Sur, Capital. Illanes reconoció haber conocido y hasta haber mantenido un encuentro sexual (dijo que la víctima le practicó sexo oral) pero dijo que ese hecho ocurrió en noviembre pasado y negó tajantemente haber sido el homicida. Según fuentes judiciales, ante el juez de Instrucción Maximiliano Blejman aseguró que entre la noche del lunes y la madrugada del martes realizó otras cosas, y mencionó como testigos a tres parientes, a un amigo y una joven con la que mantiene sólo encuentros sexuales.

Sin embargo su situación sigue complicada, porque ayer no supo explicar por qué en la cama de la víctima estaba un sobre de preservativo usado de la marca Prime, exactamente coincidente en su color y en el número de lote con otros dos preservativos que le secuestraron de su mochila cuando lo apresaron. Illanes se explayó durante casi cuatro horas y no terminó de declarar: la indagatoria sigue el viernes, precisaron.