Sigue preso. El "Loquillo" Matías Leonardo Rodríguez (28) negó su vinculación con el robo y la muerte de la jubilada. Para un fiscal y la jueza, se probó que fue el autor de ese homicidio en ocasión de robo.

El "Loquillo" Matías Leonardo Rodríguez (28) recibió ayer su segundo castigo. El 30 de septiembre de 2015 lo habían condenado a 1 año y 3 meses de prisión por un delito menor: hurto por escalamiento. Pero ayer, su historial delictivo pasó a otro nivel, con un castigo más abultado: la jueza Silvia Peña Sansó de Ruiz (Sala I, Cámara Penal) lo condenó a 12 años 9 meses de cárcel por homicidio en ocasión de robo. Para la magistrado, no quedaron dudas de que este sujeto causó la muerte de la jubilada Nélida Marina Verón (tenía 61 años y sufría diabetes) para arrebatarle la cartera con su jubilación y sus documentos, un lluvioso mediodía del 18 de mayo de 2017 a metros de la casa de la víctima en Villa El Salvador, Chimbas.

La defensa del condenado anticipó que intentará revertir el fallo en la Corte.

La pena que le impusieron representó una adhesión total al pedido del fiscal subrogante Carlos Rodríguez, para quien tampoco quedaron dudas de la vinculación del "Loquillo" con la muerte de la jubilada, básicamente por dos pruebas claves: el testimonio del cuñado de la mujer, el expolicía Julio Catalini, que aseguró haberse cruzado con el ahora condenado apenas ocurrió el delito. Y el informe del médico forense Carlos Cantoni, quien aludió a que el corazón de la víctima estaba sano pero sufrió una repentina falta de sangre por un exceso de adrenalina, típico de las situaciones con un exceso de estrés.

Rodríguez había vivido en el barrio Pateta y al momento de los hechos visitaba a su novia en el barrio Lebensohn, ambos cercanos a la casa de la fallecida.

Fue esa circunstancia la que llevó a los pesquisas a dejar de tener como sospechoso a Edgar Moreno y a clavar las miradas en el "Loquillo", a quien le secuestraron un bicicleta todoterreno pintada de azul sobre el verde que supuestamente tenía cuando ocurrió el hecho.

Para el defensor César Jofré, sin embargo, esas pruebas no fueron tales. Cuestionó la de la bicicleta, porque una testigo habló de una "playera". Y porque Catalini apareció como testigo recién un mes después y lo describió de una manera distinta a cómo luce su cliente, pues el expolicía habló de dientes prominentes y al "Loquillo" le faltan varios dientes superiores. Por eso pidió que lo absolvieran. Ayer, Jofré dijo que reclamará ante la Corte para intentar revertir el fallo.