Melisa Quiroga tiene 4 chicos, de entre 10 y 1 año, es ama de casa y el único sostén económico es su marido, que trabaja para una empresa minera. Los 6 alquilan una vivienda en Rawson y en septiembre se iban a mudar a un lugar más amplio y cómodo. Pero desde hace unos días, ese objetivo quedó relegado por una estafa: con el cuento de haber sido premiada en un concurso, le llamaron por teléfono y la engañaron diciéndole que había ganado $350.000 para construir una casa, pero a cambio debía pagar unos impuestos, contó Quiroga. La chica cayó en el engaño y como no tenía efectivo, mandó una encomienda de $45.000 en aparatos a Córdoba. A los pocos días, se dio cuenta junto a su marido que habían sido embaucados.

Melisa contó que su marido estaba trabajando cuando recibió el llamado de un sujeto. ‘El número era de Buenos Aires. Era un hombre que dijo ser abogado de ‘Viviendas Esperanza’, que es de Córdoba. Me dijo que había ganado un concurso para construir una casa del Procrear. Nosotros estamos pagando un terreno del Procrear y al principio dudé, pero me envolvieron de tal forma que caí. También chequeé por internet. La empresa y los impuestos que debía pagar existen, por eso también caí’, dijo la chica. Luego, el sujeto le dijo a Quiroga que debía hacer una cuenta en el Banco Nación y pagar unos impuestos de AFIP para obtener los $350.000. Pero como no tenía dinero, el estafador le dijo que podía mandar aparatos a una casa de empeño de Córdoba. ‘Tenía un aire acondicionado, un TV LCD de 40’, una tablet y una mini pimer, todo con 3 meses de uso. Los mandé y los días siguientes me llamaron en promedio unas 30 veces por día. Me felicitaban, después me llamó un hombre diciendo que era el presidente de AFIP y que debía pagar otro impuesto para obtener el premio. Hasta hice bajar a mi marido porque nos dijeron que debíamos grabar una publicidad. Ahí le mandamos una netbook’, dijo Melisa. Y agregó: ‘ojalá que a otra gente no le pase. Lo peor es que hice la denuncia y en la Policía me dijeron que va ser imposible recuperar mis cosas’.