Ricardo Adrián Salva, empresario de transporte y expresidente de Sportivo Desamparados.

En una audiencia celebrada este jueves en la tarde en el Primer Juzgado Correccional se resolvió la sentencia del empresario Ricardo Salvá, quien el 22 de julio de 2013 mató con su vehículo a un nene de 10 años.

La fiscal Claudia Salica había solicitado la pena de 3 años de prisión en suspenso (no irá preso) y 7 años de inhabilitación para manejar, que fue rubricada por el juez Juan Pablo Ortega.

Salvá, uno de los dueños de la empresa El Triunfo y expresidente del Club Sportivo Desamparados, había declarado que en la siesta de aquel fatídico día cuando transitaba con su auto Audi por calle Nuche poco antes de Ameghino, no vio a Kevin Malla (10) que circulaba en bicicleta.

Las pericias y algunos testigos jugaron en contra de la estrategia judicial del empresario quien buscó a través de sus abogados defensores la absolución.