Nota de Los Andes

El 26 de junio del 2020, Mendoza se conmovió ante un grave caso policial. María Elena Caro, una anciana de 72 años, se convirtió en la víctima de un aberrante hecho luego de que un hombre irrumpiera en su casa, la golpeara, violara y sustrajera objetos de valor. La misma mujer, casi un año después, falleció este lunes en su domicilio y ahora se investiga si la causa de su muerte se relaciona con esta experiencia, de la cual nunca logro recuperarse por completo.

Tal es así que los investigadores estudian si podría agravarse la situación del único detenido, Guillermo Peluso. El hombre de 36 años se encuentra imputado por homicidio criminis causa agravado por ser en contexto de violencia de género (femicidio) en grado de tentativa en concurso real con robo simple y abuso sexual agravado.

La crónica del horror

En horas de la mañana del 27 de junio del año pasado, uno de los hijos de la víctima llegó a la casa de Tres Carabelas, entre Elpidio González y San Francisco del Monte, en Guaymallén, y encontró a su mamá gravemente herida.

“Mi mamá está muerta, llena de sangre y golpeada”, dijo agitado en su primera llamada al 911. Sin embargo, minutos más tarde volvió a llamar: “No está muerta, ¡respira!”, ratificó.

En aquel entonces, el hijo de la señora atacada contó que él salió de la vivienda y al regresar encontró a su madre agonizando en el baño. La mujer estaba tirada sobre un charco de su propia sangre e inconsciente.

Rápidamente una ambulancia del SEC la trasladó al hospital Central. Se mantuvo internada en el nosocomio durante un largo tiempo con graves heridas en sus genitales y en varias partes del cuerpo, producto de los fuertes golpes y de ser abusada sexualmente.