San Juan, 9 de octubre.- La estrategia de la defensa de Fernando Flores, principal sospechoso de haber asesinado a Rocío Villalón, va de un lado hacia otro. Al término de la indagatoria a su defendido, Gustavo Vila expresó a los medios presentes que "fue un accidente, no quiso matarla". "La intensión de Flores no fue matarla, se vio abordado por el alcohol y eso hizo que se arrebatara", señaló, manifestando así algo totalmente distinto a lo que él mismo dijo hoy en la mañana en los micrófonos de Radio Sarmiento.
Pero además, ingresando a Tribunales, Fernando Flores expresó a Diario de Cuyo Online que era inocente y que se arrepentía de las declaraciones que dio ayer a la prensa, donde había afirmado que mató a Rocío señalando que “no quise hacerlo, estaba curado. Pido perdón a la familia”.
Pero al finalizar la declaración indagatoria, el único que habló con la prensa fue el abogado Gustavo Vila, declarando algo totalmente distinto a lo que él mismo dijo en la mañana y reconociendo que su defendido intervino en el hecho pero que todo fue un accidente. También incorpora en el relato una botella, la que habría sido utilizada para golpear a Rocío y dejó entrever que podría haberse registrado una pelea previa a la muerte.
Hasta el momento, todo es más que confuso en el caso.