Dos hermanitas y una amiga que se quedaron solas ayer en una casa del barrio Alameda II, en Rawson, se salvaron de lo peor luego de que la pieza donde se encontraban se quemara por completo por una vela que ellas encendieron por temor a la oscuridad, informaron fuentes policiales. El fuego destruyó aparatos, ropa y muebles, pero también causó gran malestar en algunos vecinos y un hermano de las niñas, quienes criticaron a la madre y una hermana mayor por dejarlas solas.
El siniestro se produjo en la casa 8 de la manzana E de ese barrio cuando las 2 hermanas, de 10 y 8 años, se encontraban con una amiguita. La versión policial indica que Marisa Vega (43, separada) se fue a la casa de su novio y dejó a cargo a su hija mayor, de 20 años. Antes de las 2, la joven se cambió y se fue a bailar, dejando a las tres menores solas.
Al rato, las niñas prendieron una vela y cayó sobre una cama, desatando el fuego. Por suerte, bomberos de Rawson controlaron a tiempo las llamas. ‘Mi mamá y mi hermana son un desastre, las niñas podrían haber muerto’, dijo Gerardo, otro hijo de Vega.