Una heladera, un aire acondicionado, una cocina, muebles, dos colchones y daños en la estructura edilicia. Ese fue el saldo de un dañino incendio que ocurrió a raíz de una falla eléctrica en una vivienda que alquila una pareja y sus dos niños, de 7 y 3 años, en calle Urquiza 1976 Sur, en el barrio Rivadavia Sur, Rivadavia. 

Rubén Farías, el dueño de casa, contó que el siniestro podría haber acarreado consecuencias mucho peores, ya que su mujer y sus hijos dormían en ese sector. Pero no les pasó nada a ninguno gracias a que el menor de los niños se despertó a tiempo y alertó a su madre sobre el humo.

El hecho trascendió ayer, pero ocurrió el último jueves alrededor de las 16.30. Farías es el único sostén de su casa y actualmente trabaja como empleado en un kiosco.

Esa tarde, el joven estaba trabajando cuando todo pasó. ‘Natalia, mi señora, estaba con los niños durmiendo en la cocina, porque ahí tenemos el aire. Ellos estaban durmiendo y mi hijo más chico fue quien se dio cuenta del humo y le avisó a mi mujer’, dijo el muchacho.

Enseguida, varios vecinos empezaron a echar agua que sacaban de una pileta del fondo y su esfuerzo evitó un mal mayor, pero todo lo que había en la cocina quedó destruido.