A través de un fallo judicial que seguramente va despertar polémica, un tribunal dispuso poner en libertad a una pareja que está acusada de matar a golpes a su propia beba en 2010. Ellos son Nicolás Atilio Agüero y Sonia Marisol Romero, que se beneficiaron con este dictamen a raíz de que pasaron más de 2 años presos sin tener aún sentencia, revelaron fuentes judiciales. Ambos abandonaron el penal de Chimbas el viernes a la noche y, si bien están procesados, ahora podrán esperar el juicio (que no tiene fecha) en libertad, con el mal antecedente de que anteriormente permanecieron prófugos por alrededor de 7 meses.
La liberación de Nicolás Agüero (32) y Sonia Romero (26) fue ordenada el viernes al mediodía por los jueces Silvia Peña Sanso de Ruíz, Ricardo Conte Grand y Eugenio Barbera, quienes conformaron el tribunal de la Sala II de la Cámara Penal que resolvió el pedido de excarcelación interpuesto por los defensores de los imputados, afirmó una fuente judicial. No se conocieron los fundamentos, pero un allegado a la causa señaló que los magistrados resolvieron en sintonía con otros fallos, avalados por la Corte de Justicia, con respecto al cese de la detención en los casos en que se excede el tiempo de la prisión preventiva. Si bien hay casos excepcionales en que se puede prolongar la detención, en esta ocasión aparentemente los jueces no lo creyeron necesario.
Desde el 2010:
La causa lleva ya 4 años. Y comenzó justamente en abril del 2010. Fue la tarde del miércoles 14 de ese mes, cuando Sonia Romero llevó a su hija Alina Suárez Romero de 2 años al hospital de Caucete porque, dijo, se sentía mal tras caerse de la mesa en su casa en Villa Dolores, en ese departamento. La nena murió a la hora y los médicos notaron que las heridas no eran producto de una simple caída. La autopsia reveló que tenía más de 30 lesiones, algunas de antigua data. Otras eran recientes, como golpes en distintas partes del cuerpo, incluso dos costillas fracturadas, el bazo y un riñón rotos, una lesión en zona cerebral y un hematoma en los intestinos, informaron en ese entonces fuentes de la investigación.
Romero y Nicolás Agüero, en ese entonces padrastro de la nena, fueron detenidos e imputados. El 12 de agosto de 2010, el juez José Atenágoras Vega del Cuarto Juzgado de Instrucción les dictó la falta de mérito y los liberó argumentando que no tenía pruebas para procesarlos. El fiscal de instrucción Daniel Guillén y la fiscal de cámara Alicia Esquivel apelaron el fallo entendiendo que había un crimen y existían elementos para acusarlos.
Idas y vueltas:
El 30 de marzo del 2011, un tribunal superior revocó el fallo del juez Vega y la causa pasó al Quinto Juzgado de Instrucción. La juez María Inés Rosselot luego ordenó indagar a Agüero y Romero, pero no se presentaron en las dos citaciones, a la vez que sus defensores pidieron la eximición de prisión para ambos. El 28 de julio del 2011, la juez directamente pidió la captura de ambos al declararlos rebeldes, pero éstos ya se habían fugado. El 5 de marzo de 2012, Agüero y Romero fueron recapturados en Caucete. Desde entonces quedaron detenidos, meses después los indagaron y los procesaron: a ella, por homicidio agravado, y a él, por homicidio simple. El tiempo fue pasando, tanto que el procesamiento quedó firme en agosto de 2013, indicó una fuente judicial. Siguieron corriendo los meses y a principio de este año, la titular del Quinto Juzgado de Instrucción pidió la prórroga de la prisión preventiva para extender por 1 año más la detención. Sin embargo, la defensa de Agüero y Romero apeló ese fallo aludiendo que correspondía la excarcelación. Fue así que ese planteo llegó a la Sala II para que resolviera, paralelamente el 7 de este mes la causa fue elevada a juicio a la Sala I. Ahora bien, por cuestión de tiempo a esta última cámara le fue imposible fijar fecha para el debate. El que sí resolvió fue el tribunal de la Sala II que, pese a la oposición de la fiscalía, dispuso liberar a la pareja por haberse excedido el tiempo de detención sin sentencia.

