Todo quemado quedó el Renault R6 de los González. Lo habían puesto a la venta porque necesitaban dinero para poder mantener a tres criaturas.

Una humilde familia de Caucete denunció que desconocidos prendieron fuego en la madrugada de ayer su auto, que estaba estacionado en la puerta de su vivienda y que estaban por vender porque necesitan dinero para poder mantener a sus tres pequeños hijos (uno de 6 años y gemelos de 3 meses), dijo el albañil José González (23), dueño del Renault R6 que luego del incendio quedó reducido a chatarra.

González, su mujer Mariquena Redondo (23) y los niños dormían en su vivienda, ubicada en la manzana "A" del sector III del barrio Felipe Cobas, cuando alrededor de las 4.10 una fuerte explosión los sacó de la cama. Ya cuando salieron el auto que compraron hace 3 años estaba envuelto en llamas, indicaron.

Un equipo de los Bomberos Voluntarios de Caucete llegó al lugar y ayudó a sofocar el fuego, pero lo cierto es que el vehículo ya estaba prácticamente quemado en su totalidad.

Al parecer, todo indica que se trató de un ataque intencional, según los damnificados. "Cuando salimos no vimos nada, pero había mucho olor a nafta. Hay alguien que está detrás de esto", sostuvo Redondo.

La mujer cobra un plan del Gobierno y contó que con el dinero que gana su marido en las changas no les alcanza. Es por eso que hace menos de una semana habían publicado un aviso de venta del vehículo en Internet y hasta posibles compradores habían quedado que iban a ir a verlo en la semana. Esos 14.000 pesos que pedían iban a servir para que la familia pudiera por lo menos cubrir las necesidades básicas de las criaturas. "La queríamos vender lo antes posible porque no tenemos ni para los pañales ni la leche de mis hijos. No sé por qué habrán hecho esto. Es gente muy dañina. Mi esposo trabajó mucho para tenerla y ahora estos malditos de mier... vienen y hacen esto. Son unos mala leche", cerró Redondo.