La tragedia pudo ser el desenlace lógico, pero ayer dos hombres escaparon al peor de los destinos luego de dos choques impresionantes. En la madrugada, en Pocito, uno de los conductores se estrelló contra un árbol y sobrevivió, aunque terminó con quebraduras en ambas piernas (ver recuadro). Por la tarde, en Chimbas, otro se desvió hacia su derecha, se metió a una acequia profunda, chocó una compuerta, un puente y una pared medianera antes de terminar despedido y con el auto de punta sostenido por las rejas de la vivienda.
DE PUNTA
El siniestro de Chimbas ocurrió a las 18 y la víctima fue Sergio Pérez, trabajador de chapa y pintura, de 35 años y padre de cuatro chicos de entre 15 años y 6 meses. Según sus familiares, en la tarde de ayer llevaba el Renault 12 de un cliente desde su casa hasta la de su padre (por Oro al Este) para iniciar trabajos el lunes, cuando -aseguraron- se le cortó la dirección y protagonizó un accidente con ribetes cinematográficos unos 200 metros al Oeste de ruta 40. Salió despedido y quedó internado porque sufrió un corte en la cabeza y otorragia, dijeron en la policía, quienes no descartan una falla humana.

