Una pelea entre un semitero y un enfermero de la Villa General Mosconi, Pocito, terminó ayer con ambos rivales heridos y una indignación vecinal contra uno de ellos, el enfermero, que al final hubo una suerte de pueblada en su contra y contra todo lo que era suyo, porque le saquearon el rancho, se lo destruyeron (le llevaron hasta los adobes) y también le prendieron fuego. Todo pasó entre las 13 y las 15 de ayer.

¿Qué llevó a Ramón Gómez (49 años, el semitero) y a su vecino Juan José Penino (35, enfermero) a pelearse? anoche era un misterio: desde la Policía se negaron a dar información a pesar de la insistente requisitoria de este diario. Por otras fuentes ligadas al caso se supo luego que Gómez terminó con fractura de mandíbula, un puntazo en la espalda y un fuerte golpe en la cabeza, entre otras lesiones.

Según los vecinos, Gómez nunca tuvo problemas con nadie, invita semitas a los niños de la villa y, ayer, en todo momento intentó evitar la pelea. ‘Le decía al enfermero que se fuera, que ya está, pero el otro lo seguía y hasta lo agarró a cadenazos. Lo único que hizo don Ramón fue defenderse con un palo cortito, encima es mucho más chico, el otro es un grandote’, precisó una vecina que pidió reserva de su nombre.

La versión de todos los vecinos de la villa es que a Gómez lo golpeó no sólo el enfermero sino también su esposa, sus padres y hasta un hermano suyo que es policía. Según ese relato Gómez hasta fue atacado por un disparo.

Más allá de la versión vecinal, voceros del caso aseguraron que Penino también debió ser asistido en el hospital por una herida cortopunzante en el pecho y un corte en una de sus orejas. De todos modos, sus ex vecinos se quejaron del comportamiento barrial del enfermero y se mostraban abiertamente a favor de Gómez.

¿Qué futuro tendrá la investigación? fuentes del caso aseguran que por ahora el titular del Segundo Juzgado en lo Correccional, Eduardo Gil, evaluará las versiones de ambas partes y la prueba a favor de una y otra posición antes de resolver el caso, siempre que no considere que se cometió un delito más grave y que debe cambiar de competencia, es decir pasar el caso a la juez María Inés Rosselot (Quinto Juzgado de Instrucción).