Un reclamo por los daños ocasionados por la lluvia (muchos de ellos también con sus domicilios dañados por el terremoto) terminó de mala manera cuando llegó la policía con la intención de despejar el paso y rehabilitar el tránsito.

El incidente ocurrió esta tarde en ruta 40 y calle 17 e intervino personal policial de Brigada de Investigaciones Sur que fue comisionado al lugar. 

La gente, ofuscada por el momento que le toca vivir por las inclemencias del tiempo, no quería saber nada con moverse del lugar hasta tanto no se presente alguna autoridad.

En momento, dos adolescentes (no precisaron las edades) arrojaron piedras al móvil policial provocado daños en la zona del guardabarros delantero derecho por lo que fueron aprehendidos y se les radiaron dos motos, una Motomel 150 cc y una Zanella 110 cc. 

Por tratarse de menores, los pesquisas dieron intervención al Segundo Juzgado Penal de la Niñez y Adolescencia.