Las relaciones de pareja, a veces, tienen maneras que se acercan más a la de vínculos tóxicos que a otra cosa. Y más grave cuando el ingrediente de la violencia toma por completo esa relación. En los primeros minutos del último sábado, ocurrió un ataque de una mujer a su novio que terminó con el hombre en el hospital con un cuchillazo al lado de su cuello.

Este diario reflejó el caso con el testimonio del muchacho, identificado com Gastón Cuevas (28), que sin dudarlo habló de que podría haberlo matado: "De p... no me tocó la aorta", dijo.

Ese mismo hombre publicó en una de sus redes sociales una foto con un comentario hace un puñado de horas donde hace mención a que volvió con su novia, la misma que hace tres días atrás casi lo mata: "Con mi tóxica, métanse en sus vidas".

Este diario intentó comunicarse con Cuevas para entender qué pasó en el medio para que, como si nada, retomaran la relación.

Cómo fue la agresión

Adolorido, el sábado pasado Cuevas contó cómo fue el ataque.

Todo ocurrió a eso de las 2 del sábado en la casa de la mujer, de apellido García (38), ubicada en el Loteo González, en la calle 6 entre España y Lemos, en Pocito. Según Cuevas, el drama empezó porque él quería irse a su casa, situada a pocos metros, a jugar a las cartas con sus hermanos y amigos. "Fue una discusión pel... yo me quería venir a jugar a las cartas para matar la cuarentena y me empezó a secar la mente", sostuvo. Ambos habían estado bebiendo alcohol.

Según su denuncia, García primero le mordió los brazos y en ese momento se metió en la pelea un sobrino de ella, con quien Cuevas ya había tenido antes varios cruces. También apareció en la escena un arma. "Ella me dijo que no iba a ir a ningún lado sino me iba a apuñalar y yo le dije que no estoy ni ahí con la apuñalada. El sobrino me tiró dos tiros y yo le pegué y le quité el arma y las balas", afirmó.

En medio de esa revuelta el hombre resultó herido a la altura de la clavícula izquierda. "En eso que discutíamos me enterró un tramontina. Me quedó clavado, yo me lo saqué. El chorro de sangre que largaba era impresionante, me saltaba mucha sangre. Ahí me desvanecí y después desperté en el hospital. Me dijeron que en la ambulancia me hicieron RCP porque no respiraba", dijo el hombre.

Pero no quedó ahí, porque ese mismo sábado le dijo a este diario que "yo no quiero saber más nada con ella, a esta no se la perdono nunca más", con lo que supuestamente le ponía fin a 5 años de relación.