La travesura de unos niños que supuestamente prendieron fuego en un descampado cerca de unas vías en Caucete, casi destruye por completo un aserradero. El fuego llegó hasta el interior del predio y desató un incendio de grandes proporciones. Ardieron más de 1.000 atados y algo de 20 camionadas de leña, dejando pérdidas por más de 18.000 pesos.
Los Bomberos de la policía y los Voluntarios de Caucete anoche, al cierre de esta edición, ya habían controlado el fuego, pero era tanta la cantidad de leña que ardía que tenían que esperar que terminara de consumirse. Incluso, una máquina con pala cargadora seguía removiendo los montículos de troncos y restos de madera para aislar los focos del siniestro.
Y eso que el fuego comenzó alrededor de las 16.15. Omar Mariño, encargado del aserradero, relató que "unos niños prendieron fuego en las líneas (del ferrocarril). Después, las llamas agarraron los parrales del fondo y todo se vino para el aserradero". En ese momento habían cinco obreros, pero no lograron contener el incendio dentro de ese predio al aire libre, ubicado en ruta 270, cerca de Colón, Caucete.
Hugo Espinoza, el dueño, dijo algo molesto, "si los bomberos voluntarios hubieran llegado temprano, a lo mejor no hubiera sucedido ésto. No es que esté disconforme con ellos, pero estuve media hora llamándolos".
Habían varias montañas de leñas sobre una superficie de algo de 100 metros por 20, en el fondo de se negocio. Eso convertía en una caldera al aserradero. Según los empleados, algunas llamas alcanzaban los 10 metros de altura. Los policías de Bomberos, al mando del oficial Daniel Domínguez, y los Voluntarios bajo las órdenes del suboficial José Alcaraz, abrieron distintos frentes para rodear el fuego. Los camiones tanques tuvieron que hacer diez viajes para abastecer de agua a los uniformados. Un vecino de apellido Pastor, también trajo su máquina cargadora para ayudar a remover la leña y así evitar que el fuego se propagara más.
Además, porque en otro sector de las propiedad habían otros montículos de leñas y pilas de pallet y cajones de madera que ahí se fabrican. También se temía que llegara a una casa vecina, pero sólo fue un susto. Espinoza comentó que se quemaron más de 1.000 atados -estaban para la venta- y 20 camionadas de leña, lo que significaba una pérdida en dinero de al menos de 18.000 pesos.
