“Me atribuyen algo que no hice”, aseguró Fabián Romero en la primera audiencia del juicio que este martes llegó a su fin por la muerte de su esposa, Margarita Bascuñan Sánchez, ocurrida en abril de 2022 en la localidad cordobesa de Salsipuedes. La Justicia lo encontró culpable y fue condenado por el delito de homicidio doblemente calificado por el vínculo y por violencia de género.

El hecho por el que fue juzgado el sospechoso, profesor de matemática, física y dibujo técnico, ocurrió el lunes 13 de abril de 2022. Aquel día, Romero llevó a Margarita a la guardia del Hospital de Urgencias de Córdoba y dijo que había sufrido un accidente.

Sin embargo, el tipo de lesiones que presentaba la víctima no coincidían con la versión del marido y el fiscal Cristian Griffi determinó que había sido asesinada y ordenó detener al profesor. La agonía de Margarita duró menos de 24 horas. Tenía un fuerte golpe en la cabeza, sufrió muerte cerebral y la desconectaron al día siguiente de haber ingresado al hospital.

En la primera audiencia del debate, que se inició el 8 de abril pasado, la fiscal de la Cámara de Cuarta Nominación, Laura Battistelli, coincidió con la calificación impuesta en la etapa de instrucción y pidió que las pruebas se encuadren con perspectiva de género al considerar que se trató de un femicidio.

En el mismo sentido, se expresó la abogada querellante de la familia de Margarita, Claudia Heredia, mientras que la defensa a cargo de Justiniano Martínez pidió al tribunal y a los jurados populares juzgar con la “certeza” de la prueba. “Si no tienen la certeza, no tengan miedo de decirlo y absolverlo”, afirmó el abogado.

Romero, que un año antes de la muerte de su esposa había sido separado de su cargo como profesor por las denuncias de acoso por parte de varios estudiantes del colegio de Agua de Oro donde daba clases, dio su versión ante el tribunal y se defendió de las acusaciones, aunque sin responder preguntas.

Según sus palabras, el domingo 22 de abril de 2022 cuando llegó a su casa, encontró a Margarita desvanecida en el baño, con signos de haber vomitado, y la llevó al Hospital de Urgencias.

“Me atribuyen algo que no hice”, aseguró el imputado. Por otro lado, aclaró que los moretones que presentaba en el cuerpo la víctima eran producto de una caída de la bicicleta que la víctima había sufrido el día anterior a su descompensación.

“Los familiares (de Margarita) tienen toda la razón en reclamar. Los acompaño en el dolor y en el sentimiento. Yo también quiero saber qué le pasó a Margarita. No soy una persona violenta, nunca le hice nada”, aseveró Romero en la primera audiencia, según replicó el diario local La Voz del Interior.

“No sabíamos lo que mi madre estaba sufriendo”

La familia de Margarita Bascuñán Sánchez viajó desde Chile, donde vivió la víctima hasta que se enamoró de Romero en un viaje y se instaló con él en la provincia de Córdoba, para declarar en el debate y esperar la decisión de la Justicia.

“Ha sido un viaje largo por tierra, un desgaste para todos, pero estamos con la convicción de que se va a hacer justicia”, dijo Cristian, uno de los hijos de Margarita, en diálogo con Telenoche (El Doce). Y subrayó: “Queremos justicia por mi hermana y que pague con perpetua. Eso nos ayudaría a superar este momento tan difícil”.

“Cuando esto ocurrió no sabíamos nada, no teníamos idea lo que mi madre estaba sufriendo. A medida que fue pasando el tiempo supimos que había una carta que había dejado ella, supimos que fue violentada, hay mucha evidencia de distinto tipo”, agregó el joven.

Este martes, tras escuchar los alegatos de las partes, llegará el veredicto para Fabián Romero en los Tribunales II de la calle Fructuoso Rivera 720. A través de las redes sociales, distintas agrupaciones sociales y feministas se autoconvocaron para acompañar a la familia en las puertas del Polo Judicial.