Buenos Aires.- El bomberito de 15 años que le salvó la vida a Mía, la beba de siete meses atropellada por delincuentes, vuelve a ser noticia por un hecho de inseguridad, pero ahora él fue la víctima. Juan Cruz Amerises fue atacado por motochorros que le tajearon una mano cerca de su casa, en el partido bonaerense de San Martín.
‘El viernes alrededor de las 21.30 había ido a buscar al primo para que venga a comer a casa. Lo acompañaba un amigo. Nos contó que pasaron dos personas en una moto roja, una le agarró una mano y cuando él logró zafarse terminó sangrando. El tipo llevaba una navaja y le produjo un corte en la mano’, relató Juana, la abuela materna del joven.
El ataque se produjo en el Barrio Sarmiento, a pocas cuadras de su vivienda. ‘Nosotros creemos que quisieron tirarlo al piso para ver si podían sacarle algo de valor pero no pudieron, porque él tiene mucha fuerza. Otra posibilidad, como cree mi hija, es que quizás lo reconocieron e intentaron agredirlo. Lo cierto es que no le robaron nada. Todos estamos indignados por lo que le pasó’, agregó. Además, explicó que Juan Cruz ‘no pudo verles las caras a sus agresores porque llevaban las gorras muy bajas’.
Juan Cruz se convirtió en un ejemplo cuando asistió a Mía, la beba de siete meses embestida junto a su madre Roxana por un Chevrolet Aveo en el cual un grupo de delincuentes intentaba escapar de la Policía. Ya siente su deseo de ser bombero voluntario como su padre, y sabe de rescate y de primeros auxilios.

