La audiencia ya estaba por terminar. La jueza Celia Maldonado ya había escuchado al fiscal Adrián Riveros (UFI Delitos Especiales) volver a pedir la prisión preventiva del "Chileno" Juan Adrián Riveros (33) y la negativa de su defensa de mantenerlo preso hasta que culmine el plazo de investigación (el próximo 18 de julio), por el crimen de Herman "Mito" Rodríguez (82), asesinado de un tiro en el rostro el pasado 18 de abril en su finca de su Pocito. La jueza iba a pasar a resolver cuando el defensor Narciso Godoy pidió la palabra para decir que su cliente iba a declarar sobre el origen del revólver calibre 22 con 3 cartuchos con el que -se sospecha- amenazó a un concuñado el domingo pasado en Pocito, arma que pudo ser la del crimen. La magistrada reinició la grabación de audio y video de la audiencia. Y Riveros, resuelto, se despachó con dichos explosivos que prometen complicar al hermano del fallecido, Eliseo "Pachico" Rodríguez (con prisión preventiva domiciliaria).

¿Qué dijo Riveros? Que un día que fueron a Bermejo (Caucete) a vender pasto en la camioneta de "Pachico", a este jubilado se le bajó la presión y le pidió chocolate que había en la guantera. Al abrirla vio dos revólveres y Rodríguez le explicó que los tenía para la finca y los animales. También aseguró que luego él le preguntó si no vendía alguno, porque un hombre que arma cuadrillas (Rosales, a quien se supone que amenazó el domingo con ese revólver) necesitaba un arma para seguridad.

Después pasó el tiempo hasta el día del crimen, el 18 de abril pasado, en que Rodríguez lo invitó a llevar unos tomates a 9 de Julio y él le dijo que no podía porque estaba trabajando. "A la 1,40 (por 13,40) llegó a mi casa en la camioneta con una moto tapada con un naylon (aún no hallan la moto de la víctima) y pensé que la llevaba para arreglar porque yo arreglo motos, pero no. Me dio el revólver envuelto en un trapo, yo se lo vendí a Rosales en $4.000 y luego le di el dinero", detalló ayer Riveros.

Después vendría el episodio el domingo, en el que -dijo- él fue la víctima. La acusación en Flagrancia le atribuye a Riveros haber ido a un carneo en la casa de Rosales, haberse embriagado, haber discutido y amenazado al dueño de casa con ir a traer un arma para matarlo a él y a sus hijos, amenaza que cumplió a medias porque Rosales y un sobrino lo tumbaron al piso y le quitaron el arma.

Riveros en cambio dijo que Rosales lo sacó para la calle, lo volteó de una trompada y le tiró el arma recriminándole por haberle vendido algo usado para matar a una persona ("esta arma está sucia", le habría dicho). También dijo que lo golpeó con una piedra en la cabeza y, ya en el piso, lo inmovilizaron, lo golpearon y le pusieron el arma en su mano hasta que llegó la Policía.

Si una pericia confirma que con ese revólver mataron a "Mito", todo se habrá complicado un poco más para el hermano de la víctima y también para Riveros, que seguirá con prisión preventiva y llegará preso al juicio que le espera en Flagrancia por portación ilegal de arma y amenazas agravadas.