Más rápido no pudo ser. Y si no fuera porque un vecino alcanzó a ver a la banda cuando entraba al negocio, de seguro se quedaban más tiempo y barrían con todo. Aún así, cinco minutos les bastó a los ladrones para alzarse ayer de madrugada con una computadora, máquinas y otra mercadería por un valor cerca de los 12.000 pesos de una ferretería de Angaco. El ocasional testigo nada pudo hacer, más que llamar a la policía, y controló los minutos que duró el robo hasta que los delincuentes huyeron en un auto antes que llegara un patrullero.

"Decíamos ésto es Angaco, acá todo es tranquilo. Y no es así. Hace 4 meses que abrimos el negocio y ya nos roban", comentó Alfredo Olivera, uno de los dueños de Ferre Sol sobre calle Nacional, en Villa El Salvador.

Los ladrones llegaron en un auto Peugeot y bajaron directamente a romper el candado del portón de la ferretería. Un vecino los vió desde lejos y en ese momento llamó al 911 de la policía, según relataron. Eran las 3.41. Al parecer, los ladrones también se dieron cuenta que los habían visto. Igual entraron, pero aparentemente se apuraron. Según Olivera, sacaron los 250 pesos de la caja, la computadora con impresora incluida, dos motoguadañas y arrasaron con las llaves, destornilladores, algunos martillos y discos de cortes diamantados, entre otras cosas. En total, robaron entre 10.000 y 12.000 pesos en mercadería, afirmó el comerciante.

El vecino observó cuando cargaban todas las cosas en el Peugeot 405 y escapaban, exactamente, a las 3.46, relató. La policía llegó a las 3.50, o sea 9 minutos después del llamado, pero no pudieron interceptar a la banda.