Faltaban segundos para las 21,45 del viernes y en el maxiquiosco ‘25 Horas’, en Rawson, aprovechaban la momentánea ausencia de clientes para tomar una gaseosa y ver algo del partido entre Colombia y Perú por la Copa América. Fue en ese instante que dos sujetos con los rostros cubiertos entraron a los gritos y, armados con revólveres, manifestaron lo evidente: ‘esto es un asalto, al piso, al piso, no miren’. A uno de los empleados todo le quedó claro en el acto y no se resistió. Pero la otra empleada y uno de los dueños del local, Carlos Domínguez, tardaron un momento en darse cuenta pues pensaban que eran dos amigos que les hacían una broma.

Dos minutos, algunos golpes y varias amenazas les llevó a esos ladrones apoderarse de los celulares de los tres jóvenes, de la plata de la recaudación de dos cajas (unos $3.000) y una mochila con unos $50.000 (entre recaudación y ahorros) que Domínguez había llevado al local para hacer un pago y ‘por seguridad’. A ese dinero se lo llevaron de casualidad, luego de ver la mochila tirada en el piso a un costado cuando ya se iban, explicó ayer Domínguez. Luego, los vecinos les dijeron que los asaltantes se habían dado a la fuga en un Chevrolet Corsa gris con logos de remís, dijo Domínguez.

Todo el asalto quedó grabado en video y por eso los ladrones cubrieron sus rostros con cuelleras y pasamontañas.

Ocurrió en ese comercio que Domínguez abrió con su mamá Andrea en octubre del año pasado en Avenida España, metros al Sur del cruce con Cabot, en Rawson. Desde entonces, en ese local se vende todo al mismo precio, día o noche, y se atiende todo el tiempo: sólo pararon de atender dos horas para brindar en Navidad.

Fue una sensación rara la de Domínguez con la plata que perdió. Ayer contó que ya del miércoles tenía un presentimiento y que el viernes a la tarde, al salir, dudó en dejar el dinero en su casa.

‘Laburamos todos los días para vivir el día a día y en dos minutos sufrís un asalto con armas en el que no sabés si seguís vivo o no (…) Ojalá que todo lo que robaron les sirva para triunfar. Muchachos, pónganse un negocio, salgan a laburar, no vendan drogas, no roben más, dejen vivir’, manifestó ayer la víctima.

Y agregó: ‘todo esto me da más fuerza para seguir trabajando’.