Un delincuente perpetró ayer en un horario pico de la tarde un asalto a mano armada contra un comercio ubicado en pleno microcentro capitalino con un plus para nada menor: lo hizo a metros de un par de confiterías con clientes, de la vista de un vendedor de pochoclos y de unos policías que custodian la Obra Social Provincia, ubicada enfrente del negocio atacado. Lo llamativo es que a pesar de estar rodeado de gente, el sospechoso logró escapar sin problemas con $1.800 y otros objetos pertenecientes a la encargada del local, indicaron fuentes policiales.
Según la Policía, el ataque ocurrió alrededor de las 20.15 en el local “Arándano”, un local de ropa y accesorios femeninos situado en calle Laprida 27 Oeste, a metros de calle Mendoza. Allí se encontraba Lilian Rosín (53) cuando un sujeto “bien vestido”, que simuló ser un cliente más, entró a preguntar los precios de algunos artículos. Pero cuando el “cliente” tuvo a la mujer a tiro, sacó un arma de fuego y la redujo, explicaron las fuentes.
La versión policial es que después el ladrón llevó a la víctima hasta el baño, cerró la puerta y huyó con un celular, $1.800 y documentación de la empleada, informaron en la Policía. A todo esto, nadie se dio cuenta del ataque hasta que la mujer salió a pedir ayuda.
Anoche, policías de la Comisaría 1ra concentraban su atención en revisar algunas filmaciones de cámaras de seguridad de la zona para tratar de obtener alguna pista que los lleve al ladrón.