La escena inicial despertó más de una sospecha entre los pesquisas: porque el interno colgaba de una remera sujetada a los barrotes de la pequeña celda donde estaba preso, no cerraba por qué había manchas de sangre que nacían de su cuello y un inodoro roto. Y por esa misma razón resolvieron no aventurarse con ninguna hipótesis, pues era probable que Juan Ramón "El Diente" Olguín (25 años, última condena unificada en 11 años y 2 meses de cárcel) hubiera resuelto quitarse la vida y tampoco era descabellado pensar que lo hubieran matado y lo colgaran para simular un suicidio, pues estaba en el pabellón 2, sector 4, de la zona de aislamiento para presos con problemas disciplinarios, dijeron fuentes policiales.

El misterio se resolvió por la noche, cuando los pesquisas conocieron el resultado de la autopsia practicada por el médico forense Alejandro Yesurón. Ahí se supo que Olguín no presentaba lesiones propias de un ataque o pelea como golpes o heridas en zonas donde él mismo no se las pudiera haber provocado, como la espalda. Según las fuentes, el médico avaló la posibilidad de que los tajos en su cuello se los hubiera autoprovocado con algún trozo del inodoro roto. Se supone que luego de esas heridas, tomó una remera mangas largas y se colgó en su celda (la número 9) de unos 3 metros de largo, por 1,80 de ancho y 2,80 de alto, precisaron las fuentes.

En la policía aseguraron ayer que los uniformados de la comisaría 30ma. al mando del comisario inspector José Antenor Olivera, conocieron el hecho alrededor de las 23 del viernes. Y que hubo tal revuelo entre los presos tras la muerte, que fue necesario controlar la situación antes de que pudieran ingresar, alrededor de las 3 de ayer, al pabellón que Olguín compartía con al menos 10 internos más.

Olguín vivía en el Lote Hogar 26, en Santa Lucía. Y sus ingresos al penal de Chimbas (cinco en total) datan desde el 18 de marzo de 2003. Desde entonces empezó a acumular condenas hasta sumar por lo menos cinco por delitos menores y también por robos agravados. La última fue la pena unificada de 11 años y meses de cárcel que cumplía recién el 11 de julio de 2018, precisaron las fuentes.

Según la policía, Olguín había intentado ahorcarse en una comisaría años atrás y también había intentado quitarse la vida prendiéndose fuego en el penal de Chimbas.