No bastó el tiempo que pasó en el Servicio Penitenciario Provincial, es que a poco de salir del Penal, Rodolfo Oscar Guajardo llamó por teléfono a su ex mujer para amanazarla. Es por eso que este jueves en juicio abreviado recibió una nueva condena, aceptó cumplir seis meses de prisión por el delito de lesiones leves agravadas por el vínculo y en contexto de violencia de género.

Guajardo había llegado al domicilio de su ex pareja el 17 de julio de este año cerca de las doce de la noche. La mujer y sus dos hijas no se encontraban en la vivienda pero el sujeto igual ingresó. Cuando la denunciante se hizo presente, Guajardo comenzó a insultarla y ambos comenzaron una fuerte discusión. Después, según la investigación, la mujer se retiró a dormir con sus hijas y fue ahí que Guajardo aprovechó para arrojarles agua con una pava. La mujer se levantó y producto de las quemaduras, perdió el equilibrio y cayó al suelo. El hombre se le puso encima y con su rodilla, apretó su cuello. Con unos vidrios de un espejo que él mismo había roto, comenzó a lastimarla. La mujer como pudo se cubrió el rostro con las manos y esas lesiones fueron constatadas por un médico legista de Cavig cuando la víctima aprovechó que el sujeto se retiró -ya en la mañana del 18 de julio- para poder realizar la denuncia.

Después de eso, el 24 de octubre y mientras Guajardo se encontraba cumpliendo su condena en el Penal de Chimbas, la víctima recibió una llamada desde un celular: "La semana que viene estoy por salir, asi que tené cuidado cuando andes por la calle", le expresó Guajardo y agregó: "Ya vas a ver lo que te va a pasar". La mujer nuevamente radicó la denuncia y este jueves Guajardo en juicio abreviado acordó una pena de 6 meses de cumplimiento efectivo a cumplir en el Servicio Penitenciario Provincial.