Al cabo de un juicio, un hombre fue condenado a 3 años de prisión en suspenso (sin encierro) por abusar sexualmente de su hijastra.

El imputado, de iniciales M.A (no es identificado completamente para proteger a la víctima) fue castigado por el delito de abuso sexual simple agravado por la guarda y la convivencia.

El fiscal de la UFI Anivi Mariano Juárez Prieto pretendía una condena de 7 años de cárcel al considerar que M.A. abusó a la menor en dos oportunidades (cuando ella tenía 9 años y a los 11), pero para el juez Diego Sánz solamente quedó probado que ocurrió solamente uno de los hechos atribuidos por Fiscalía.

El imputado fue defendido en el juicio por Leonardo Miranda.