Se trata de una situación que escandalizó a la provincia de La Rioja. Una madre, cansada del encierro por la cuarentena, decidió salir de su casa para celebrar el día del amigo. Pero dejó a su pequeño hijo de 4 años solo en su casa.

Finalmente, vecinos de La Rioja decidieron llamar al 911 por los gritos y llantos que provenían de la casa de la mujer. Una vez que ella regresí, luego de varias horas de ausencia, más específicamente a la madrugada del día siguiente, los uniformados detuvieron a la madre.

En ese instante ella llegó a amenazarlos. Y hasta dijo que el niño de 4 años “hijo era suyo y hacía lo que quería con él”. La identidad de la mujer como el del menor no se dieron a conocer. Pero se sabe que a las 22 horas del domingo pasado fue la hora aproximada en la que la madre dejó la casa.

Según informaron, el niño no solo se dio cuenta que estaba solo, sino que al mismo tiempo tenía hambre. Por estas razones comenzó a llorar y gritar por su madre. Cuando los vecinos finalmente hicieron el llamado, la policía llegó rápidamente al barrio de la provincia de La Rioja.

Los efectivos tuvieron que tirar abajo la puerta de la casa al no obtener respuesta de nadie. Finalmente encontraron al niño llorando en su cuarto, según indicaron, de hambre. Fue entonces que algunos policías compraron un par de yogures para alimentar al pequeño. Se quedaron con él hasta que finalmente arribó la madre.

Eran las 11 de la mañana del día siguiente cuando la mujer llegó luego de bailar toda la noche. Cuando se topó con la policía dentro de su casa reaccionó muy violentamente. Pero en cambio, la madre fue demorada por la situación. Mientras que el niño quedó en “situación de abrigo”, a la espera si algún familiar podrá hacerse cargo hasta que se investigue lo que pasó.

Fuente: Crónica