Un joven de 20 años que había sido detenido con otro sujeto por resistirse a ser identificado y dañar un patrullero, se fugó el jueves en la noche cuando volvía de Tribunales a los calabozos de la subcomisaría del chimbero barrio Cipolletti, aprovechando una falla en el seguro de la puerta en la camioneta policial y el hecho de que los uniformados pararon para dar paso a un colectivo en un cruce de Chimbas, dijeron fuentes policiales. El de Claudio Sebastián González es el segundo caso en 10 días protagonizado por un detenido que huye pese a la custodia policial: el anterior escape había sido más increíble y sucedió el lunes de la semana pasada en el Hospital Rawson (ver Del hospital).

Según voceros del caso, González y un sujeto de apellido Vela habían sido detenidos en el barrio 19 de Noviembre, Chimbas, por efectivos de la Base Motorizada V, porque se negaron a ser identificados y, al resistirse, dañaron el patrullero de la Fuerza.

Ambos fueron a parar a los calabozos de la subcomisaría Cipolletti. Y allí estuvieron hasta el jueves, cuando González se autoagredió. El mismo día los sospechosos fueron citados desde el Quinto Juzgado de Instrucción para ser indagados por daño agravado, pero hubo demoras en el médico legista, se hizo muy tarde y en el Juzgado postergaron el trámite, dijeron.

Los problemas para los dos policías que iban en la camioneta con Vela y González, comenzaron alrededor de las 21.45 del jueves. A esa hora, pararon en el cruce de Maradona y 25 de Mayo, Chimbas, por el paso de un colectivo de la línea 33. Y fue ahí que, con esposas y todo, González abrió la puerta aprovechando una falla en la traba de seguridad y huyó a toda carrera. En la Policía aseguran que el sujeto fue perseguido pero logró escabullirse y es intensamente buscado.

Ayer suponían que resolvió escaparse por miedo a volver al Penal de Chimbas por alguna cuenta pendiente, porque en realidad la causa por la que cayó el lunes permite la excarcelación.

El caso es investigado a nivel judicial y policial, para determinar si cabe o no alguna responsabilidad a los dos uniformados que trasladaban a González.