Héctor Ontivero (39), negó ayer haber sustraído $45.000 de la caja fuerte de ‘Terra Construcciones’ de Rawson, tal como denunciaron directivos de esa firma cuando desapareció misteriosamente dos días de su trabajo, el 16 y 17 de mayo pasados. Cuatro días después de su ‘extravío’, Ontivero fue localizado en Mendoza y entregado a la Policía por su abogado Maximiliano Páez Delgado. El plato fuerte de su declaración fue sin embargo su explosiva versión sobre el supuesto destino de ese dinero: dijo que era para pagar ‘retornos’ o ’coimas a la gente del municipio de Iglesia, al intendente de Iglesia (Mauro Marinero), al director de Obras Públicas y a los administrativos de los expedientes por la provisión de hormigón elaborado’, dijeron fuentes judiciales. Según Ontivero, el dinero lo entregaba un compañero suyo, Luis Alvarez.

‘Son versiones totalmente falaces que sólo apuntan a convertirse en una coartada de este sujeto. El manejo de la obra pública y las cuentas del municipio son totalmente transparentes y están controlados por el mismo municipio y un organismo externo, como el Tribunal de Cuentas’, dijo una fuente de la intendencia iglesiana.

Ontivero puso en duda también a los directivos de la empresa, de la que se mostró agradecido por darle trabajo después de un año en el que sufrió depresión y un intento de suicidio. Ayer no explicó cómo apareció en Mendoza. Sólo dijo que hace días se le accidentó un hijo y que tras conocer el delicado estado de salud de otra hija, tomó entre 70 y 100 pastillas de un anticonvulsivo y no supo qué fue de él. Otra versión, señala a Ontivero como jugador compulsivo que tal vez hurtó por una deuda de juego.