Llorando, dijo "no pude llegar a él, que me perdone. No pude ayudarlo por ninguna forma", referiéndose al otro operario.

Así se lamentaba Hugo Rodríguez, que de milagro salió con vida después de quedar atrapado cerca de un barranco cuando intentaba bajar a ayudar al ahora fallecido, José Luis Acosta (46). El operativo policial de rescate duró casi 18 horas. Rodríguez fue rescatado esa misma tarde, pero recién ayer a las 4 de la madrugada el grupo de uniformados, comandados por el comisario Roberto Elizondo y el oficial Daniel Domínguez, lograron descender con el cadáver.

Los dos empleados del Supercanal habían subido a la cima de un cerro a mover una antena el viernes a la mañana. Ya regresaban, cuando Acosta cayó por el borde del cerro. "Ví a mi compañero cuando iba cayendo y se me perdió de vista. Intenté bajar a auxiliarlo, pero era imposible", relató Rodríguez. Contó que pidió ayuda por su celular, mientras tanto buscó descender por otro lugar y tiró una cuerda, pero no llegó hasta el herido. Volvió a subir, pero un desmoronamiento no lo dejó avanzar. "No podía subir ni bajar. Subía y me volvía a desbarrancar. Por eso me quedé ahí a esperar la ayuda. Estuve como tres horas. No lo podía ver a Acosta, pero lo escuchaba, y ahora lo sigo escuchando. Me pedía que fuera, que lo ayudara a acomodarlo porque estaba boca abajo. Y yo trataba por todos los medios de llegar a él, pero no podía. Hablaba y hablaba, pero después ya no le entendía qué decía. Se quejaba, se quejaba. Lo escuché hasta unos 20 minutos antes que llegaran los policías, después no lo sentí más. No pude llegar a él, que me perdone. No pude ayudarlo…", dijo llorando.

Rodríguez explicó que jamás pensó que Acosta estaba muerto. Luego los policías se lo confirmaron. También aseguró que "obviamente que no pienso volver a subir nunca más ahí, y voy a hablar con mis compañeros para que nadie suba", dijo.