Era la salida típica para aprovechar el primer día del fin de semana largo. La posibilidad de recrearse, distenderse y, de paso acercarse, a la Difunta Correa por una promesa. Con esa intención salieron ayer tres familias amigas desde Lavalle, en Mendoza, a bordo de tres vehículos. Pero cuando estaban a punto de llegar a destino, una falla mecánica envolvió el viaje en una situación bastante estresante: la destrucción de un neumático trasero de un Fiat Spazio, que hizo perder el control a su conductor y lo mandó a los tumbos con el resto de su familia, dijeron ayer fuentes policiales y gente que asistió a las víctimas durante el siniestro.
La previsión del cinturón de seguridad pareció ser un condimento clave para que ese accidente no pasara de ser una circunstancia imprevista minutos después de las 8 de ayer en la ruta 141, antes de ingresar a la zona de Guayama y a unos 5 kilómetros al Este del control forestal de Caucete, precisaron voceros policiales.
Las víctimas fueron identificadas en la policía como Natividad Subia (40 años, conductora del vehículo), su esposo Sandro Flores (40) y las hijas de ambos, Johana (18) y Elena Magalí (16). Ayer circuló el dato de que una de las jovencitas podía estar embarazada, pero la versión no fue confirmada.
Lo que sí quedó claro es que ninguna de estas personas oriundas de Bolivia pero radicadas en Mendoza, sufrió heridas graves. Sólo el jefe de hogar se manifestó ‘bastante dolorido’ ante la llegada de las primeros testigos que los asistieron, pero ni él ni el resto de su familia abordó la ambulancia que llegó al lugar.
Es más, luego del choque cambiaron la rueda trasera izquierda del auto, lo remolcaron cerca del control forestal, se acomodaron con las otras familias y siguieron viaje, seguramente para agradecerle a la Difunta que nada les hubiera pasado.

